Crisis laboral. ¿Qué es?
Está claro que la gran mayoría de las personas necesitamos de un empleo para poder subsistir, vivir dignamente y tener nuestras necesidades cubiertas. Además de realizar una actividad que nos haga sentir bien y nos de un sentido. La misma Constitución Española reconoce en su artículo 35 “el derecho al trabajo, a la libre elección de profesión u oficio, a la promoción a través del trabajo y a una remuneración suficiente para satisfacer sus necesidades y las de su familia“. Y sin embargo, ni las condiciones laborales ni el entorno, ni el tipo de trabajo coinciden siempre con lo que necesitaríamos o nos haría felices. Puede llegar el caso de que el trabajo nos genere tanta insatisfacción y sufrimiento que entremos en una crisis laboral.
Puede que estés pasando por una situación de crisis laboral si: un día laborable te cuesta levantarte más de lo normal, notas una tensión en la oficina que se corta con un cuchillo, te sientes menos motivado y productivo o te cuesta desconectar del trabajo cuando llegas a casa.
¿Qué tipos de crisis laboral hay?
Una crisis de este tipo puede ser por diferentes motivos, algunas pueden ser más por motivos internos, otras por motivos externos. En cualquier caso, la mayoría se debe a una combinación de diferentes factores. Vamos a ver los motivos de crisis laboral más frecuentes:
Frustración
Uno de los motivos más comunes tiene que ver con la sensación de frustración o vacío al realizar una tarea que no coincide con lo esperado. Quizás es un trabajo demasiado aburrido o monótono, o quizás se trata de un desempeño que no es acorde con la formación que se ha hecho, siendo en la mayoría de las veces un trabajo de un rango y salario menor. Cuando empleamos mucho tiempo y dinero en una formación y no tenemos el tipo de empleo esperado, podemos sentir mucha frustración.
Ambiente laboral
El trabajo es un lugar donde pasamos un tercio de nuestras vidas. Si bien uno no va al trabajo para hacer amigos, tenemos el deseo de sentirnos cómodos y felices en un lugar en el que vamos a pasar muchas horas al día. Por desgracia esto no siempre es así. Pueden darse problemas con la autoridad, encontrarnos con un equipo o personas conflictivas o con un ambiente más competitivo que cooperativo. En los casos más graves podemos toparnos con jefes autoritarios y agresivos o con problemas de aislamiento, dificultad para encajar o acoso laboral (mobbing).
Explotación/Autoexplotación: burn out y estrés
Es posible que estemos trabajando más horas que lo acordado en el contrato o que lo estemos haciendo a unos niveles de presión sostenida en el tiempo. La respuesta de estrés es muy eficaz cuando se pone en marcha puntualmente, de hecho esta respuesta es muy adaptativa y la ponen en marcha todos los seres vivos (Ej: la gacela huyendo del león). Sin embargo cuando los niveles de estrés son mantenidos en el tiempo, nos acaba generando problemas de salud de todo tipo. Llega entonces el síndrome de burnout (o estar quemado), en donde sucede un agotamiento físico, mental y emocional. Dejamos entonces de ser productivos y normalmente implica una baja laboral.
Un síntoma claro de que estamos sufriendo un estrés sostenido en el tiempo es la dificultad para conciliar y desconectar. El crecimiento del empleo online y los trabajos de gestión virtual son un caldo de cultivo perfecto para no separar el tiempo personal del laboral.
La autoexplotación, de la que habla el filósofo Byung-Chul Han, es algo muy característico del Occidente contemporáneo. A veces no son solo las condiciones externas de sobreexigencia sino también las internas. Nuestro juez interior puede obligarnos severamente a ser altamente productivos sin escuchar las necesidades propias. Es algo que, aunque no solo, a los autónomos nos puede ocurrir con más frecuencia: podemos hacer de jefe tirano de nosotros mismos.
Incertidumbre y crisis laboral
Se entiende que el trabajo nos debería proporcionar una sensación de estabilidad y seguridad. Pero no siempre es así. A veces el salario es insuficiente para cubrir las necesidades básicas personales y/o familiares. Otras veces las condiciones de empleo nos generan demasiada incertidumbre a causa de la temporalidad o de que un determinado proyecto reciba dinero o no.
Podemos sentir también mucha incertidumbre cuando nos estamos planteando dejar el trabajo por diferentes motivos. Podemos sentirnos que nos arrojamos a un mundo lleno de inseguridad y posibles fracasos. A veces podemos estar en un impasse, en donde tenemos claro lo que no queremos pero aún no tenemos claro lo que queremos.
Desempleo
Una situación de desempleo puede cuestionarnos frontalmente nuestra sensación de valía. Es mucho lo que podemos sentir que se pone en juego relacionado con nuestra autoestima, identidad y autoconcepto. Son muchas y serias las consecuencias psicológicas de una situación prolongada de desempleo. Y lo que es peor, un desempleo prolongado puede poner en riesgo nuestra estabilidad en muchos sentidos.
Crisis laboral ¿Cómo te podemos ayudar?
Cada caso es único, por tanto la mejor manera de trabajar una crisis laboral es a través de un proceso psicoterapéutico individualizado. Sin embargo, podemos ofrecerte aquí algunas tips que te ayuden a reflexionar o enfocar el problema desde otro ángulo:
Desidealizar el trabajo
Cuando nos acercamos al final de la vida, nadie piensa: ¡Que poco tiempo le dedique a la oficina! Autor desconocido
Aunque lo cierto es que el trabajo nos da un sentido importante de quienes somos, es importante diferenciar el hacer del ser. Y desde ahí entender que el trabajo es una parte de la vida, pero ni la única ni la que nos da todo el sentido. Somos mucho más que un trabajo, y lo sano es atender a otras áreas de la vida. En esta línea, Munia Ruiz habla del mito del trabajo romántico, haciendo una analogía con el ideal de amor romántico, dice:
Parece que los:
“Sin ti no soy nada.”
“Me muero por ti”
“Sólo puedo ser feliz si estoy en pareja”
“Lo doy todo por ti.”del amor romántico han llegado al trabajo.
“Sólo puedo desarrollarme como persona si me dedico a mi pasión. “
“Yo he venido a este mundo a…”
“Me dedicaré a lo mío sea como sea (aunque viva en precario).”¿Y si no tienes una vocación? ¿Eres menos?
Y si la tienes pero no puedes vivir de ella ¿estás condenada a ser infeliz?
¿Y cuando te jubiles? ( vale, sí, si tienes esa suerte…) ¿Tu vida dejará de tener sentido?Y qué decepción si descubres que no te llena tanto o no siempre, o que hay etapas en las que pierdes la motivación, o que no es cómo tú esperabas…
Ufff, cuántas expectativas y qué presión.
El trabajo (aunque sea de lo tuyo) no puede dártelo todo.
Tu identidad ( el sentido de quién tú eres) no te lo da el trabajo.
El sentido de tu existencia no lo da el trabajo.¿Qué te puede dar grandísimas satisfacciones?
Sí, claro!( No seré yo quien diga que no persigas tu vocación si la tienes). Al igual que una pareja no puede cumplir todas tus necesidades, deseos y expectativas , llenar todos tus huecos y vacíos, el trabajo tampoco puede hacerlo.Somos seres de múltiples facetas y potencialidades a desarrollar, que se pueden expandir en tantas áreas!!
No pongas todos los huevos en la misma cesta. Suele ser el camino directo a la frustración y el sufrimiento.
El trabajo vocacional nunca es tan ideal como uno ha soñado. Y por ello conviene relajarse si uno no ha encontrado su vocación profesional pero tiene un trabajo alimenticio que le proporciona la suficiente seguridad. Somos mucho más que lo que hacemos. Cuando vamos poniendo más el acento en el ser que en el hacer y no fiamos nuestra identidad al desempeño, podemos relajarnos en ese sentido.
Atribución interna vs externa
Responsabilzarnos de nuestras acciones es algo sano. Sobrerresponsabilizarnos es hacernos cargo de asuntos que no son nuestros. A veces nos atribuimos internamente (“no soy capaz”, “no puedo”, “no gestiono bien la presión”) problemas que quizás no son tanto nuestros sino de la empresa, ya que quizás estamos soportando una carga de trabajo superior a la posible.
Hay lugares que ofrecen formaciones, en principio orientadas al bienestar tipo mindfulness o coaching, pero que pueden tener un trasfondo perverso. En determinados casos, estas formaciones no irían dirigidas tanto a un cuidado del profesional sino a una exigencia implícita de que el empleado debe saber gestionar mejor sus emociones y rendir más. Cuando las empresas hacen uso de estos cursos en lugar de tomar medidas reales para el cuidado del trabajador, es posible que la persona acabe atribuyéndose internamente su incapacidad para rendir adecuadamente.
Es importante aprender a diferenciar la atribución externa de la interna y saber distinguir qué asuntos de deben a una falta de eficacia personal y cuáles tendrían más que ver con una organización deficitaria o explotadora de la empresa.
Autocuidado y límites
Lo ideal sería que la empresa cuidara de nosotros para prevenir una situación de crisis laboral. Es algo lógico que si me siento cuidado voy a rendir más y mejor. Pero la realidad es que esto no se da en muchas de las ocasiones. Por ello es necesario poner en marcha estrategias de afrontamiento y responsabilizarnos de nuestro propio cuidado en forma de acciones encaminadas a poner límites. Nadie más lo va a hacer por nosotros.
Aceptación
Concédenos serenidad
para aceptar las cosas que no podemos cambiar,
valor para cambiar las que sí podemos,
y sabiduría para discernir la diferencia.
A veces el sufrimiento y el estrés pasa en parte por la dificultad de aceptar la realidad de la empresa. Es importante desde ahí saber qué asuntos podemos cambiar y cuáles no. Aceptar no sería resignarse sino darnos cuenta de lo que hay y no tanto de lo que debería haber o cómo debería ser. Quizás hay asuntos que si aceptamos profundamente dejamos de pelearnos y así funcionar de un modo más ligero y fluido.
En Concienciarte te podemos acompañar a atravesar una crisis laboral
Nuestro equipo está capacitado y entrenado para acompañarte en estos difíciles momentos. El trabajo es una parte fundamental de nuestra identidad: nos da orden y estuctura, nos permite subsistir, nos da un sentido vital y nos permite conectar con otras personas. Si estás necesitando acompañamiento contacta con nosotros.
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