Seguimos avanzando con la serie dedicada al eneagrama. Este mes traemos al eneatipo 5.
Contamos de nuevo con los originales relatos de Mónica Alonso, esta vez con uno tan conciso como el carácter que define:
“Cinco prendas de vestir tiene. Las dobla cuidadosamente y las guarda en la cajonera más alta. Por la humedad. Toca el piano, la flauta y la batería. Siempre a solas. No soporta que los vecinos le oigan cantar. Aunque lo hace bien. Él no hace turismo, viaja. Come solo cuando siente hambre. Y a veces se le olvida. Hay semanas que apenas sale de su estudio, componiendo e imaginando sinfonías para la banda sonora de una nueva vida. Cinco prendas de vestir tiene. No más.
Tanto por ofrecer. Y el miedo a perder lo acorrala.” Uknne Moon: Cinco prendas
Características de personalidad
El rasgo fundamental del 5 es la avaricia, pero no se trata ni mucho menos de una avaricia orientada a la codicia, si no de una pasión por retener. Y esa tendencia a la retención no tiene porqué estar orientada a lo material (que también) si no fundamentalmente a no darse a los demás, donde el componente íntimo y emocional aparece. Austeros hacia dentro y fuera, hay un miedo de que si dan lo poco que tienen van a perderlo y se quedarán vacíos.
Se trata de personas fundamentalmente mentales, muy en contacto con sus pensamientos y reflexiones pero muy escindidos de su conciencia emocional y corporal. El 5 prefiere explicarse la vida antes que vivirla. Es por ello que suelen ser unos apasionados del saber, como si tuvieran la creencia de que el conocimiento es lo que les va a salvar. Probablemente muchos de los grandes intelectuales y científicos a lo largo de la historia hayan funcionado desde este carácter.
Las relaciones sociales tienden a vivirse con tensión. Pueden sentirse especialmente torpes y no querer participar ni disfrutar del contacto con los otros. Parece que el 5 mira sentado mientras los demás bailan. Así que sería mejor retirarse y vivir con gozo la soledad, como si se dijeran que “la soledad no es mala, el problema es el mundo”.
Sensibilidad y desapego
Es probable que las personas eneatipo 5 sean las más sensibles de todo el eneagrama, seguramente una de las razones por las que buscan esconderse. Pero al contrario que el eneatipo 4, esa sensibilidad ni se comparte ni se expresa . También como el 4, están muy en contacto con la carencia pues probablemente recibieron poco de niños. Pero aquí no hay queja sino resignación.
Tienen un rico mundo interior que se queda a buen recaudo dentro de ellos. Uno puede tener la sensación de que el 5 viviera metafóricamente dentro de una cueva llena de secretos inaccesibles a la mayoría.
La fijación del 5 es el desapego, pero no se trata de un desapego sano sino neurótico. Se trataría de vivir en una impasible actitud de retirada, intentando no desgastarse mucho ahí fuera en un mundo tan inhóspito y que absorbe tanta energía. La famosa frase de Mafalda “¡¡¡Paren el mundo que me quiero bajar!!!” bien la podría haber dicho un eneatipo 5.
Fenotipo y psicopatología
Al ser un carácter muy intelectual, es como si hubieran disociado su cabeza del cuerpo. Así que su motricidad puede ser torpe y desgarbada. Hay un gran parecido entre el eneatipo 5 y el carácter esquizoide bioenergético. Juan José Albert en su libro Ternura y agresividad refiere que: “El esquizoide se relaciona con su cuerpo sin una clara consciencia del yo corporal; como si su cuerpo fuese un caparazón en el que está obligado a habitar y que prácticamente constituye un estorbo que soporta de mala gana. ” Añade que “La mirada en el carácter esquizoide suele impresionar como la de una persona fijada en el temor [···], para ailarse emocionalmente de ese sentimiento de pánico es para lo que tensa rígidamente toda su estructura corporal.”
Una persona de este carácter con un funcionamiento muy neurótico podría acercarse a lo que el DSM 5 denomina el Trastorno esquizoide de la personalidad (301.2), que se caracteriza por “Un patrón general de distanciamiento de las relaciones sociales y de restricción de la expresión emocional en el plano interpersonal, que comienza al principio de la edad adulta y se da en diversos contextos”. Algunos de los criterios que tienen que darse para el diagnóstico (y que encajarían con la aproximación menos sana del 5), son: falta de disfrute de las relaciones personales, elección de actividades solitarias, indiferente a halagos y críticas de los demás , frialdad emocional y aplanamiento afectivo entre otras.
El buen desapego y otras virtudes
Antes se ha mencionado que en el 5 existe un despego patológico que le hace retirarse del mundo. La virtud esencial que propone Claudio Naranjo para el 5 es practicar un sano desapego, pues en verdad hay pocas cosas con tanto apego como la avaricia.
Les viene muy bien soltar y dejar que la vida fluya sin querer controlarla. Desde ahí cualquier actividad de tipo corporal y experiencial les resulta transformadora. Aunque al principio tengan muchas resistencias para entrar en cuerpo y emociones, a la larga suelen agradecerlo, ya que les hace sentirse mucho más libres, vitales y plenos.
Entrar en el mundo emocional, suyo y de los demás, permitirse expresar tantas emociones contenidas como la rabia, tristeza, alegría, etcétera, les da una nueva paleta de colores con la que vivir la vida de otra manera.
Otros eneatipos publicados:
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Fue desde mi propio proceso de sentir como mi sufrimiento fue sanando a través de la psicoterapia que decidí reconvertirme en psicoterapeuta. Y es desde ahí que tengo y siento la plena confianza de que cuando somos acompañados desde la presencia y se nos ofrece buen abono, tierra y agua,las personas crecemos como flores.
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