Una de los conceptos fundamentales en psicoterapia es la de la distorsión cognitiva, es decir, no vemos el mundo tal cuál es sino pasado por nuestro filtro de personalidad que hemos ido formando a la vez que nuestro carácter se ha ido haciendo. Tal filtro contiene ideas sobre la vida, las relaciones, el poder, el amor…La gran mayoría no son ideas conscientes: son las llamadas ideas locas.
El término de distorsión cognitiva proviene de la terapia cognitivo-conductual, pero desde los tiempos del budismo ya se hablaba de algo similar. El budismo entiende las distorsiones como una expresión de la ignorancia (avidya en sánscrito). Avidya quiere decir mente poco clara, oscurecida por una percepción equivocada de la realidad. Una de las técnicas de meditación budista más milenarias y populares es la llamada meditación vipassana (convertida en mindfulness en occidente), que significa “ver las cosas como son”.
Tanto la psicoterapia como el budismo coinciden en que los errores cognitivos son causa de sufrimiento y de psicopatología, puesto que los pensamientos influyen sin duda en las emociones. Sin embargo, en el proceso de ir aprendiendo nos ha sido imposible no adquirir ideas erróneas sobre la vida y sobre nosotros. Nos sirvió para adaptarnos al ambiente que nos tocó vivir. Por tanto las ideas locas suelen ser pensamientos implícitos, inconscientes e introyectados (aprendidos sin digerir).
¿Qué contenido tienen las ideas locas?
Son de carácter absoluto y suelen estar acompañadas de “siempre” o “nunca”, pues se trata de ideas rígidas y desadaptativas en el presente aunque adaptativas en el pasado. El contenido de tales variará en función del carácter de cada persona. Hay ideas que son más periféricas y otras que responden a asuntos más nucleares de la persona
A continuación expongo algunas de ellas, (cada una correspondiente a un tipo de carácter según el eneagrama) :
“Todo es mejorable siempre”, “Yo sé lo que tú necesitas, tú no”, “El prestigio es mi autoestima”, “Por más que haga, nunca es suficiente”, “Siempre se está mejor solo que mal acompañado”, “Nunca le voy a gustar a alguien que me gusta”, “Si sufro me muero”, “Si digo la verdad haré daño”
¿Como se trabajan las ideas locas en terapia gestalt?
Al contrario que en las terapias cognitivo conductuales, donde las distorsiones se trabajan de un modo sistematizado, en terapia gestalt se van trabajando en conexión con lo que la persona trae a sesión. A medida que se va profundizando en lo que sucede en cada momento, se pueden ir explicitando tales ideas. La función del terapeuta es acompañar sin juicio y ayudar a que estas vayan saliendo a flote.
Las ideas locas no se explicitan así como así, primero hemos de ser conscientes de que las tenemos. Una vez que las identificamos podemos permitirnos verlas desde la perspectiva de un observador externo, un testigo que se puede permitir cuestionarlas y quizás también ver el origen biográfico de estas.
Identificar, hacernos cargo y cuestionar nuestras distorsiones cognitivas es garantía de salud, pues desaprendiendo viejos patrones es como podremos ir aprendiendo y experimentando nuevas formas de hacer, sentir y ser.
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