La indiferenciación creativa (Friedlander): polaridades y salud en terapia Gestalt
Polaridades y salud, dos conceptos que es importante relacionar en terapia. Voy a continuar escribiendo sobre este tema que abordó mi compañero Rafael Pérez en Polaridades y autoconcepto en Terapia Gestalt, integrando los opuestos, dado que me parece de mucha relevancia en consulta.
En Gestalt se considera el estado de salud en una especie de punto cero que se encuentra a mitad de camino entre dos opuestos, entre dos polos.
De este modo frente a la expresión “yo soy tímido” (que tiene mucho que ver con cómo se ha construido el individuo en su historia personal), aparece la idea de “puedo elegir ser extrovertido o introvertido en función de la situación en la que me encuentre”.
Es decir, la flexibilidad y la capacidad de adaptación al entorno son cuestiones relevantes a tener en cuenta a la hora de plantearnos “qué es la salud”, dado que nos ayudan como veremos, a evitar el sufrimiento (distinguiendo sufrimiento de dolor, ya que el dolor es inherente a la vida, pero el sufrimiento nos lo creamos con nuestros modos de movernos en el mundo y relacionarnos).
Saliendo de la zona de confort: “El yo soy así” no ayuda
“Yo soy así”, una expresión muy habitual que puede servirte para intentar que te acepten tal y como eres, sin embargo también te limita como persona.
Cuando la escucho pienso, qué función cumple esta frase en la vida de esta persona. Me sorprende encontrar en muchas ocasiones la búsqueda de amor detrás de ella: “ámame como soy, yo soy así”, o un intento de no hacerse cargo y desresponsabilizarse “nunca voy a cambiar”.
Creo que en el fondo, y sin darse cuenta, muchos se infantilizan con esta frase, se privan a sí mismos de una comprensión profunda de los dilemas humanos, y por tanto de soluciones que impliquen el crecimiento de ambas partes en un conflicto.
Prueba cambiar ese “yo soy así” por “aquí y ahora yo estoy eligiendo ser así”, ¿qué tal te suena?. Ahora pregúntate, éste modo que estoy eligiendo me genera sufrimiento a mí y/o a mis seres queridos?. Más que “yo soy así” sería preferible decir “he aprendido a funcionar así”.
¿A qué nos referimos cuando hablamos de crecimiento personal?
Crecimiento personal Significa ir más allá de los propios límites, conquistar nuevos espacios, salir de la zona de confort, ampliar el autoconcepto. Con esto no quiero decir que haya que estar saliendo de la zona de confort constantemente puesto que ésta tiene una función, nos sirve para descansar, sentirnos seguros y ocuparnos de otras cosas. Sin embargo si nos quedamos todo el tiempo en ella probablemente nos privemos también de esos estímulos que nos hacen crecer como personas.
Crecimiento personal para una persona tímida sería explorar su faceta extrovertida, para alguien que tiende a enfadarse probablemente sea permitirse explorar con la tristeza, y en definitiva, para quien que siempre se comporta del mismo modo, probar algo diferente.
Es verdad que el amor propio implica aceptación de uno mismo y mostrarnos como somos confiando en que nos aceptarán y nos querrán, entonces, ¿cómo conciliar el aceptarme tal y cómo soy con esa expansión más allá de mis límites que implica el crecimiento personal? En principio puede parecer una contradicción, ser como soy pero de otra manera.
Aceptación no es resignación. La integración de las polaridades
Ahora pienso en las parejas que consiguen perdurar en el tiempo de manera sana, ambos amándose pero también creciendo, para que la relación pueda hacer camino los dos han de estar comprometidos con el autoanálisis y con el deseo de crecer. En ocasiones sosteniendo la frustración de los propios límites y los del compañero, mirando con amor y compasión, pero de igual modo queriendo crecer. Apoyar el proceso con amor, como el que riega una planta y pacientemente sabe esperar a que crezca.
El cambio no puede ser impuesto desde fuera, ni desde las necesidades del otro, ha de ser un deseo que viene de dentro, un deseo que tiene que ver con amarse a uno mismo y amar a los que nos rodean.
Quererte cómo eres es importante, sin duda. Querer que te acepten tal y como eres también. Ahora, si te produce sufrimiento a ti o a tu seres queridos recuerda, puedes aprender y descubrir otros modos de ser, de actuar y de estar. Forma parte de nuestra naturaleza humana.
Flexibilidad igual a salud
Sostener la angustia del vacío no es tarea fácil sin embargo aunque la frase “yo soy así” nos define, también nos encierra. La meditación es un camino que nos devuelve a ese punto cero de indiferenciación creativa, en el que no me defino sino que puedo autocrearme en cada momento para adaptarme a las situaciones que el entorno me plantea. También el trabajo con las polaridades que se lleva a cabo en terapia Gestalt, por ejemplo “la silla vacía”.
El proceso terapéutico pasa por atravesar emociones muy profundas que nos hacen anclarnos y rigidizarnos en alguna polaridad, para así experimentar su contraria y ampliar nuestro espacio interior. Ese estado de flexibilidad en el que puedo ser una cosa pero también su contraria nos sana.
Polaridades y salud: “Los extremos se disuelven por inclusión, no por negación ni aplastamiento. En el momento en el que alguien trasciende los opuestos y llega a verlos como complementarios, ya no es más sólo una parte del todo, sino que el todo se manifiesta en esa parte” (Los cuadrenos del IPG pág 14).
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