Panorama de la medicina occidental actual
Cuando acudimos a un hospital vemos que los diferentes médicos y departamentos se dividen por especialidades: el cardiólogo, el ginecólogo, el dermatólogo, ….
Así la enfermedad se trata como algo localizado que solo afecta a una parte de nosotros, sin tener en cuenta el resto. Muchas veces recibimos una atención parcial pues sentimos que se nos trata como “esa pierna enferma”, pero se olvida “lo demás” que hay en nosotros.
Las personas somos más que órganos o tejidos
Somos personas que sufrimos, que sentimos miedo e incertidumbre; y que nos dolemos no solo a nivel físico sino también a nivel emocional y en nuestra alma.
Todo nuestro organismo está interrelacionado e interconectado. A su vez las personas estamos interrelacionadas e interconectadas entre sí (por ejemplo a través de los vínculos) y con otras entidades, como la sociedad o la cultura.
Las llamadas enfermedades psicosomáticas son un ejemplo de lo complejo y oscuro de nuestro funcionamiento y han sido durante mucho tiempo “el caballo de batalla” de la medicina, por no saber cómo tratarlas adecuadamente.
¿Cuerpo o mente?
Ninguna enfermedad es solo del cuerpo o de la mente. Mente y cuerpo funcionan coordinados. Enferman juntos pero también pueden sanar juntos. Por eso ante cualquier alteración o enfermedad no podemos intervenir solamente sobre lo físico. Debemos tratar de forma global el Ser Humano en su totalidad.
En el cuerpo a veces se expresan conflictos psíquicos ¿Alguna vez hemos tenido “problemas digestivos” cuando nos sentíamos nerviosos, angustiados o con miedo?
Somos CUERPO + PSIQUE + NUESTRA HISTORIA O EXPERIENCIA (pérdidas y ganancias, frases escuchadas y pronunciadas, cosas vividas,…) Por eso es tan importante descifrar y entender un síntoma antes de abordarlo directamente.
La salud es integridad de la persona
Buscamos recuperar la salud y no solamente curar un mal.
La Organización Mundial de la Salud dice: “La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”.
En la Terapia Gestalt el protagonista es la persona, y no su enfermedad
La Gestalt es una terapia holística porque :
Integra: Recupera nuestra totalidad, integrando la personalidad (asimilando aspectos no resueltos, inconscientes o negados de uno mismo).
Unifica: También trabaja sobre los diferentes planos de todo Ser Humano: afectivo, de conducta, cognitivo, fisiológico y espiritual. Enlazándolos entre sí, unificándolos. Defiende el valor único (genuino) e intrínseco de cada individuo.
Cada realidad es un todo distinto de la suma de las partes que lo componen. Las personas somos un todo integrado y global
Haciendo terapia, una forma integral de acercarnos al otro es más humana porque tiene en cuenta todo lo que somos (historia personal, emociones, nuestra alma o ámbito espiritual, ….) Se acerca a nosotros desde lo global, desde la totalidad.
¿Por qué hacemos lo que hacemos? :
-Intentamos dar cabida a la gran complejidad del ser humano.
–Escuchamos con atención.
-Realizamos una intervención terapéutica más sensible.
-Más centrados en sanar (SALUD), que en curar.
-Creemos en la importancia de aliviar. Crear consuelo, aligerando el peso de nuestros padecimientos.
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