Psicólogos Ansiedad en Madrid
¿Tengo ansiedad?
Antes de hablar del tratamiento de la ansiedad, primero debemos comprender a qué nos referimos cuando hablamos de ansiedad. Existen muchos términos relacionados, que pueden generarnos confusión. Para empezar, es importante que distingamos entre miedo, ansiedad y angustia.
Miedo
El miedo es una respuesta a un estímulo concreto real o imaginado que aparece en el presente (miedo a las serpientes). Conlleva una activación que prepara al organismo para el ataque o la huida.
Ansiedad
La ansiedad es una respuesta a una amenaza futura, suele ir asociada con tensión muscular, intentos de control y conductas evitativas.
Angustia
La angustia no responde a ningún estímulo identificable, sino que más bien suele ser un estado de malestar y opresión difuso. Sobre todo se relaciona con sensaciones corporales.
¿Es lo mismo ansiedad, ataque de ansiedad y Trastorno de Ansiedad Generalizada?
La diferencia entre tener ansiedad, tener un ataque de ansiedad y padecer un Trastorno de Ansiedad Generalizada es una cuestión de grados:
Ansiedad
Podemos decir que cierto nivel de ansiedad es inevitable en aquellas situaciones en las que percibimos el futuro como amenazante, y por ello en ocasiones es importante despatologizarla. El mecanismo de intentar anticiparse es un intento de controlar aquello que de manera objetiva está fuera de nuestro alcance. Esto, muchas veces ocurre de manera automática, y sin mucha conciencia por parte de la persona.
La mente se anida en el futuro con todo tipo de mensajes “¿Y si…?”, dónde se evalúan potenciales consecuencias negativas sobre lo que podría pasar. Proyectarse en el futuro es una capacidad exclusivamente humana y que ha tenido su utilidad evolutiva. El problema es cuando ese exceso de preocupación sobre lo que podría pasar, nos genera un sufrimiento innecesario en el presente.
La ansiedad suele cursar con manifestaciones físicas: respiración más corta y superficial, latido cardiaco acelerado, músculos en tensión (inlcuido el diafragma), sequedad en la boca, entre otros.
Ataque de ansiedad
Experimentar un ataque de ansiedad puede ser algo puntual. Se siente de una manera mucho más intensa y con sensación de pérdida de control. Frecuentemente en estos casos se entra en una especie de círculo vicioso:
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- La persona comienza a experimentar síntomas físicos de malestar que no puede controlar.
- Se asusta de los síntomas físicos que está teniendo y el susto hace que los síntomas aumenten.
- Como los síntomas aumentan, el miedo aumenta y por tanto los síntomas siguen intensificándose.
- Así se sigue escalando sucesivamente, hasta que llegamos al ataque de ansiedad. En este punto la persona puede llegar a creer que algo muy grave está sucediendo, o incluso que la vida está en peligro. Por ejemplo, un ataque al corazón.
Síntomas del Ataque de Ansiedad
En el ataque de ansiedad escalamos desde un malestar hasta una pérdida de control del propio cuerpo.
Los síntomas que pueden presentarse durante el ataque de ansiedad o crisis de angustia son: Palpitaciones, sacudidas del corazón o elevación de la frecuencia cardiaca, temblores, sensación de ahogo, falta de aire y/o atragantarse. Opresión, malestar torácico, nauseas, molestias abdominales, inestabilidad, mareo o desmayo. Sensación de irrealidad o de estar separado de uno mismo (despersonalización), sofocaciones o escalofríos, entumecimiento y miedos irracionales. Dichos síntomas han de tenerse en cuenta en el tratamiento de la ansiedad.
Trastorno de Ansiedad Generalizada
Sin embargo cuando hablamos de Trastorno de Ansiedad Generalizada, la preocupación es constante e intensa. Si se resuelve un motivo de malestar, inmediatamente aparece otro. El temor puede ser desproporcionado y la persona reaccionar excesivamente en comparación con las demandas reales de la situación. Lo que caracteriza al Trastorno de Ansiedad Generalizada es la persistencia en el tiempo (teniendo una duración de seis meses o más). La preocupación sobre los distintos problemas de la vida que pueden ser difíciles de controlar (estudios, trabajo, relaciones…) genera una serie de síntomas característicos.
Síntomas del Trastorno de Ansiedad Generalizada
Inquietud, nerviosismo, fatiga, dificultad para concentrarse, mente en blanco, irritabilidad, problemas de sueño, tensión muscular, latido cardiaco elevado, etc. La activación fisiológica suele ser alta y el sistema nervioso simpático (la parte del sistema autónomo que se encarga de ponerse en marcha en situaciones de alerta) se sobre activa. La mayoría de las veces de forma innecesaria y poco funcional.Todas estas diferencias de términos son tenidas en cuenta a la hora de valorar cada caso en particular. Con ésta información se planteará el tratamiento de la ansiedad. Dicho tratamiento nunca será el mismo para todos los casos, ya que las diferencias individuales juegan un papel fundamental.
La ansiedad es uno de los síntomas que a causa del Covid-19, más está apareciendo. Estamos pudiendo observar sentimientos colectivos de inquietud ante lo que está por venir. Desde Concienciarte, ofrecemos ayuda psicológica online y presencial para trabajar la ansiedad.
Aunque la vida en sí misma sea incierta, ahora lo es mucho más.
La ansiedad como mensaje
Ya hemos hablado más arriba de los síntomas asociados a diferentes manifestaciones de la ansiedad, pero también podemos tomar a la ansiedad como un mensaje que hay que aprender a escuchar. Los síntomas físicos siempre nos quieren decir algo. Es frecuente que lo que nos hace ir a terapia es la punta del iceberg (síntomas), sin embargo durante las sesiones la persona habitualmente descubre que el problema va más allá.
Podemos entonces poner voz a la ansiedad: ¿qué nos está queriendo transmitir? ¿qué pide que cambiemos en nuestras vidas?. Por ello, no solamente nos centraremos en el tratamiento de la ansiedad con el objetivo de quitar el síntoma cuanto antes. Ello podría significar “comida para hoy y hambre para mañana”. Nuestra misión será ir un paso más allá para ver qué cuestiones de la historia, del funcionamiento o del carácter de la persona alimentan el síntoma.
Tratamiento de la ansiedad
En el tratamiento de la ansiedad enfocado en el síntoma existen multitud de técnicas. Algunas de estas son:
Reestructuración cognitiva, exposición sistemática, autoinstrucciones, planificación de refuerzos, parada de pensamiento, estrategias de afrontamiento, inoculación de estrés, técnicas para la toma de conciencia, relajación muscular, expresión emocional, y prevención de respuesta…
Tratamiento de la ansiedad y Terapia Gestalt
La Terapia Gestalt (nuestra terapia marco) sin embargo, va más allá de la aplicación de técnicas concretas. Considera que es en la relación con el terapeuta, la historia biográfica y la postura existencial de la persona, donde se encuentran claves importantes para dejar atrás la ansiedad.
Dicho enfoque se basa ante todo en poner la conciencia al momento presente. Por tanto, ya es de por sí un modo indirecto de abordar la ansiedad.
Desde nuestra perspectiva invitamos a que la persona se dé cuenta de lo que le sucede “aquí y ahora”, atendiendo a sus emociones y sensaciones corporales. De ese modo, aprenderá a tomar conciencia de si misma. Cuando esto ocurre, poco a poco comienza a afrontar aquello de lo que suele escapar (ya sean situaciones, estados de ánimos o asuntos pendientes con personas significativas).
La gestión de las estrategias evitativas suele ser un ingrediente importante en el tratamiento de la ansiedad. Si bien en Concienciarte no solo trabajamos en el síntoma, también le damos la atención que merece.
Una de las herramientas que usamos por tanto es la práctica del mindfulness o atención plena.
¿Cuándo es recomendable la terapia/tratamiento para la ansiedad?
No es necesario que esperes a que el problema se agrave o se enquiste, siempre es mejor prevenir que lamentar. Si sientes que la ansiedad te desborda y que tus herramientas para gestionarla son insuficientes pide ayuda.
En ocasiones el nivel de ansiedad es tan alto que es necesario incorporar otros apoyos como la medicación (siempre bajo prescripción psiquiátrica). Una vez que tenemos unos mínimos de contención es el momento de trabajar a nivel más profundo para desarrollar los recursos suficientes y que la medicación deje de ser necesaria.
Recuerda que sufrir en soledad puede agravar el problema. Nuestro equipo está cualificado para acompañarte en tu camino de recuperación, pide una primera cita gratuita.
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Guau! Estoy “flipando” como dicen ustedes! Muy buen artículo, te invito a que el próximo mes puedas pasarte por mi sitio web ya que estoy preparando un contenido sobre la ansiedad que te podría gustar!
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Gracias! visitaremos tu web 🙂